Porque… ¿a qué se dedicaban as mulleres?

Empezamos a recuperar el rastro de las mujeres que destacaron en los deportes, en la cultura y en las artes. Vamos teniendo datos sobre muchas que realizaron labores de excepción en los pocos ámbitos que el contexto histórico les permitía como religiosas, misioneras o filántropas. Incluso de otras que contribuyeron con su lucha, sufrimiento, y hasta con la vida, a la conquista de libertades como guerrilleras, sindicalistas, revolucionarias, libertarias, milicianas…

Pero destaca la carencia casi absoluta de referencias a su medio de vida, como si la mayor parte planearan en un escenario de ausencia de necesidades y, por tanto, de relaciones económicas. O como si este tipo de datos afeara el derecho a la recuperación de sus logros.

Lo cierto es que, a pesar de las trampas y dificultades, las mujeres llevan siglos ejerciendo y participando en las actividades productivas, siendo actoras de su supervivencia, contribuyendo a generar riqueza y empleo. Esta carencia de datos constituye la línea conceptual del libro Empresarias Xubiladas.

Investigando enfoques

De la amnesia a la sobredosis de datos, la recuperación de la memoria histórica parece, en muchos casos, un síntoma de febriles estados transitorios. Y digo esto con mucho cuidado puesto que lo que no me gusta es el mal uso de los conceptos.

Una etiqueta debe ser una referencia de uso, un protocolo de entendimiento, un estado transitorio y revisable. Jamás debe convertirse en el cajón de sastre al que parecemos tener tanta afición como a los titulares.

“Memoria histórica” no me parece una definición correcta si sólo implica enfrentamiento y archivo mientras se pasa por alto lo que debe ser su objetivo, que necesariamente ha de enlazar con el motivo que origina la necesidad de recuperación: justicia, aprendizaje, progreso… ¡Depende! Si hablamos de personas, no me suelen gustar las grandes teorías porque lo colectivo no es sino un conjunto de identidades personales enredadas en el marco de un contexto.

Todo esto pensé en 2008 cuando la presidenta fundadora de las organizaciones de empresarias de Galicia se sublevaba, con razón, por lo que consideraba una oportunista manipulación de las instituciones al organizar la exposición “Pioneiras“. Conociendo mi afición a cuestionar y a investigar, acudió a mí con lo que ella pretendía que fuera el gran homenaje a las que estaban vivas. Y lo quería… ¡Ya!

“Quizais porque como muller de acción gusta máis de feitos que de promesas. Quizais porque o tempo sempre se lle fixo curto, a pesares de que semella ter vivido máis vidas que o resto. Quizais porque  reivindica, para si mesma, e para as demais, o dereito a contar en primeira persoa os grandes ou pequenos acertos e erros. Quizais porque o tempo foille dando a  certeza de que as palabras son un instrumento poderoso”

Pero no era tan sencillo, sobre todo por la falta de datos, de registros y de canales de información, que tan sólo permitía obtener datos de los casos excepcionales que tanto gustan para los reportajes en los días “D”. El objetivo eran empresarias “de a pié”, cuya “falta de excepcionalidad” no suele merecer la categoría de referenciable en los canales oficiales.  Hubo que convencerla de que debía hacerse con un cierto rigor y eso implicaba recursos, sistema, etapas y objetivos medibles.

Acordamos pues una primera fase de “contextualización” que se podría ir completando con el tiempo, a medida que se fueran creando nuevas asociaciones comarcales, que facilitarían el contacto con las empresarias jubiladas a las que quería ir re-conociendo.

A pesar de mi afición al relato, lo que me resultó especialmente satisfactorio fue la búsqueda de enfoque para la construcción del contexto, hasta que llegamos a la conclusión de que el punto de partida tenía que ser la “percepción social y el tratamiento histórico respecto a la actividad empresarial de las mujeres”. El proceso está descrito en el capítulo del libro que habla de “Contexto e metodoloxía” y “Antecedentes inmediatos”.

“O que si proba esta carencia é a herdanza de séculos de silencio que axuda a  contextualizar a percepción social e histórica do traballo das mulleres cobrando sentido, máis que nunca, a diferenciación traballo-ocupación-salario-emprego”.

“De feito, unha das principais conclusións, de carácter cualitativo, refírese á constante omisión, por pudor cando non mal intencionado esquecemento, respecto a datos que relacionen o traballo e a ocupación das mulleres co diñeiro, de lexitimar os seus intereses e aportacións económicas  incluso cando esta se refería claramente a actividades “extradomésticas” e remuneradas“.

Si algo se pone de relevancia en estas páginas es que, bajo esa expresión de “actividades extradomésticas remuneradas” se ocultaban auténticas iniciativas empresariales que, en muchos casos, no sólo constituían el único soporte económico sino que crearon y dinamizaron auténticas redes comerciales. Y todo esto en una época en la que la tradición, pero sobre todo la ley, prohibía a las mujeres ejercer y liderar ningún tipo de actividad económica remunerada. Ni siquiera disponer de su propio dinero en casos de herencias.

Por eso decía al principio que lo importante de los trabajos de recuperación está en la construcción del contexto pero, para eso, la perspectiva histórica implica preguntarse por las causas de ese silencio y la relación con la situación actual. Y contarlo es importante porque las palabras son un instrumento poderoso.

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Isabel Iglesias

Experta en análisis estratégico y dinamización de la información. Investigadora de nuevas realidades, alérgica a los tópicos, bloguera... Productora y guionista. Desde 2009 uniendo Cine e Investigación para contar esas nuevas realidades por descubrir como la película Máscaras. En desarrollo dMudanza, componiendo la polifonía de voces de reflexión de la ciudad.